Abogado de violencia doméstica en los condados de Monmouth y Middlesex
También atendemos a clientes en el condado de Middlesex y en todo el estado
La violencia doméstica es un delito terrible, pero eso no significa que todos los acusados sean culpables. Las personas que se enfrentan a estos cargos pueden ser condenadas al ostracismo por amigos y familiares. Necesitan saber que su abogado cree en ellos. Este es el tipo de representación que la gente del condado de Monmouth, el condado de Middlesex y alrededores puede encontrar en Law Offices of Carlos Diaz-Cobo. Tenemos más de 18 años de experiencia y utilizamos todo este conocimiento para ayudar a nuestros clientes a proteger sus registros de antecedentes, su reputación y su libertad.
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¿Qué constituye violencia doméstica según las leyes de Nueva Jersey?
La violencia doméstica en Nueva Jersey es un comportamiento abusivo infligido por un miembro del hogar o de la familia a otro. La persona acusada debe tener una relación específica con la presunta víctima, como ser cónyuge, ex cónyuge, cohabitante o pareja romántica. La violencia doméstica abarca una amplia gama de actos con la intención de controlar, intimidar o dañar a alguien.
El abuso físico es una de las formas más comúnmente procesadas de violencia doméstica e incluye agresión, agresión con lesiones o empujones. Además, incluso si no hay contacto físico directo, las amenazas, el acoso o el comportamiento intimidatorio, como la vigilancia constante o el abuso verbal, pueden considerarse como violencia doméstica. Actos como el acoso y las acciones coercitivas que hacen temer por la seguridad personal también se clasifican bajo esta definición.
Además, el abuso financiero es otra forma menos obvia, pero no menos válida, de violencia doméstica. Retener el acceso al dinero, robar ingresos o sabotear la capacidad de alguien para ganar dinero también puede considerarse un comportamiento abusivo bajo ciertas circunstancias.
Defensa contra cargos de violencia doméstica
Se pueden emplear varias estrategias de defensa comunes, dependiendo de las circunstancias específicas del caso. Algunas de ellas son:
Defensa propia
Cuando alguien actúa para protegerse de un daño físico inminente, sus acciones pueden estar legalmente justificadas. Por ejemplo, si un acusado golpeó a su pareja para detener un ataque contra él mismo o contra otra persona, podemos argumentar que la fuerza fue necesaria y proporcional a la amenaza. Las alegaciones de defensa propia a menudo dependen en gran medida del testimonio de testigos y de las pruebas físicas, como informes médicos o lesiones.
Falta de pruebas
Otra estrategia eficaz es impugnar la suficiencia de las pruebas de la fiscalía. Los casos de violencia doméstica a menudo se basan en declaraciones de la presunta víctima, que pueden carecer de corroboración de pruebas físicas o por parte de testigos. En Law Offices of Carlos Diaz-Cobo, podemos investigar a fondo las inconsistencias o los detalles faltantes en el caso de la fiscalía, argumentando que las pruebas son insuficientes para justificar una condena.