Abogados defensores para casos de agresión sexual con agravantes en los condados de Monmouth y Middlesex
Defendiendo con orgullo a clientes en el condado de Middlesex y en todo Nueva Jersey
Enfrentarse a cargos por agresión sexual con agravantes es un serio desafío legal que puede cambiarle la vida. Según el código penal de Nueva Jersey, la agresión sexual con agravantes se clasifica como un delito de primer grado, por lo que es extremadamente importante contar con un buen abogado si le acusan de este delito. Law Offices of Carlos Diaz-Cobo tiene más de 18 años de experiencia ayudando a los acusados en el condado de Monmouth, el condado de Middlesex y en todo el estado de Nueva Jersey.
En este tipo de casos, a menudo se presentan acusaciones de contacto sexual en circunstancias consideradas particularmente atroces, como cuando la víctima es menor de edad, cuando se usa fuerza física o amenazas, o cuando el acusado tiene una posición de autoridad sobre la víctima, como un maestro o cuidador.
Llame hoy al (848) 207-2709 o contáctenos online para programar una consulta gratis.
Sanciones por agresión sexual con agravantes en Nueva Jersey
Una condena por agresión sexual con agravantes generalmente resulta en una sentencia de prisión de 10 a 20 años. Cuando la presunta víctima es menor de 13 años, las penas van de 25 años a cadena perpetua. Además, la Ley de No Liberación Anticipada de Nueva Jersey exige que los condenados por cargos de primer y segundo grado deben cumplir al menos el 85% de su sentencia de prisión antes de ser elegibles para la libertad condicional.
También hay sanciones financieras, como multas que pueden llegar hasta los 250.000 dólares. Sin embargo, las repercusiones legales no terminan con el encarcelamiento o el castigo financiero. Los acusados condenados por agresión sexual con agravantes se enfrentan a desafíos sociales y legales duraderos, particularmente aquellos relacionados con la Ley Megan.
Según la Ley Megan, cualquier persona condenada por ciertos delitos sexuales, como la agresión sexual con agravantes, debe registrarse como delincuente sexual en Nueva Jersey. Este registro no es un evento único, sino que conlleva obligaciones de por vida, actualizaciones periódicas y un escrutinio constante. Los inscritos deben notificar a las autoridades su dirección, inscripción escolar o situación laboral, y debe informarse de cualquier cambio dentro de plazos específicos.
Una vez que alguien figura en el registro de delincuentes sexuales, su información puede ser de acceso público. Esto puede conducir a dificultades significativas a la hora de conseguir vivienda, empleo y de mantener relaciones personales. El estigma del registro a menudo aísla a las personas de sus comunidades, creando barreras para la rehabilitación y la reincorporación significativa a la sociedad.
Todo esto hace que contar con una estrategia de defensa fuerte y vigorosa sea aún más importante. En Law Offices of Carlos Diaz-Cobo sabemos cómo ayudar.
Defensa contra cargos de agresión sexual con agravantes
La defensa legal requiere tanto un pensamiento estratégico como una comprensión profunda de las leyes. Los casos de delitos sexuales suelen ser muy emocionales y existe un grave riesgo de que el jurado pueda prejuzgar al acusado. Un abogado defensor debe saber cómo recordar a los miembros del jurado el derecho del acusado a la presunción de inocencia y, después, ser lo suficientemente hábil para sembrar dudas sobre el caso de la fiscalía.
El consentimiento, o la falta del mismo, a menudo se encuentra en el corazón de estos casos y puede ser un punto crucial en la defensa. Demostrar que la interacción fue consensuada puede hacer añicos el caso de la fiscalía. Sin embargo, la ley de Nueva Jersey define el consentimiento de manera específica, y ciertas circunstancias, como la participación de menores o los desequilibrios de poder señalados anteriormente, pueden negar por completo la posibilidad del consentimiento. Sabemos cómo diseccionar los matices del consentimiento, sacando a la luz toda la información relevante.
Las pruebas, tanto físicas como testimoniales, juegan un papel muy importante en estos casos. Las pruebas de ADN, las declaraciones de los testigos, las comunicaciones electrónicas y los registros médicos se examinan comúnmente en las investigaciones de agresión sexual con agravantes.
Sin embargo, la forma en que se recopilan, analizan y presentan estas pruebas puede reforzar o socavar un caso. Por ejemplo, las pruebas manipuladas o interpretadas incorrectamente pueden poner en duda su fiabilidad. Sabemos cómo analizar los detalles, identificar fallos y usarlos para proteger los intereses de nuestros clientes.
Las acusaciones falsas son otro elemento crítico que debe abordarse. Aunque muchas denuncias de agresión sexual son genuinas, también hay acusaciones falsas, tal vez motivadas por agravios personales, batallas por la custodia o malentendidos. Defenderse contra acusaciones falsas requiere un trabajo de investigación exhaustivo, como descubrir inconsistencias en las declaraciones de los testigos o motivos para mentir.